PANAMÁ ONE WAY

 

Escritores; Alberto Cabredo, Carlos Wynter y Pedro Crennes Castro.

PANAMA ONE WAY

 

HISTORIAS PANAMEÑAS EN UNA SOLA VÍA

 

     Las ciudades tienen mucho que contar. En cada calle, plaza, parque o esquina se esconde una historia y la ciudad de Panamá no es la excepción. Nuestro carácter cosmopolita lo ha querido así. Ser una zona de tránsito por excelencia es un caldo de cultivo para la creación de cuentos, historias y leyendas de todo tipo. Fundada dos veces y destruida una, ya la marca como gran protagonista de increíbles historias que muchos autores panameños se han dado a la tarea de desmenuzar a lo largo de nuestra vida republicana.

    Carlos Oriel Wynter Melo ( 1971) es el artífice de esta antología de cuentos urbanos Panamá One Way que nunca antes se había hecho. Es uno de los escritores más reconocidos de la actualidad ganador de varios premios nacionales e internacionales.  Es dueño de su propia editorial: Fuga editorial que ha publicado varios libros de autores panameños reforzando la bibliografía nacional.

  Son 28 cuentos ( Adriano Mckenzie, Alberto Cabredo, Alelí Salcedo, Ariel Moreno, Eduardo Pereda G. , Daniel Delgado, Deybeth Arauz, Digna de la Rosa Córdoba, Doris Sánchez de Polanco, Gabriel Branca, Héctor Aquiles González, Héctor Xatruch, Heriberto Pinzón Rodríguez, Isabel Burgos, Jorge Bennet, Jorge Simmons, Leocadio Padilla, Lupita Bragin, Lupita Navarro, Mariana Mcpherson, Melva Wong, Vilma Calderón, Yesenia Cañate y Yolanda Ríos de Moreno)  con sabor a hojaldra, a carimañola, a pixbae, a naitafon, a sancocho de gallina donde deambulan distintos personajes populares rescatados por sus autores desde lo más recóndito de la sociedad panameña.

    Así tenemos: amores no correspondidos, los populares quemes (infidelidades), mangos por botellas, peleas callejeras, boxeadores locos y frustrados, apodos o sobrenombres, generales en su nube, historias de fantasmas de la antigua zona del canal, etc. Hay de todo como en botica. Panamá One Way: Historias bien panameñas en una sola vía. La de darnos a conocer como pueblo alegre y sobre todo cuentero.